La compañía
confirma la contratación de medio centenar de empleados durante la visita a las
instalaciones del consejero de Innovación y Empleo
La
planta de Airbus Military, situada en el polígono Tecnobahía, en El Puerto,
aumentará su plantilla en 50 trabajadores para atender los nuevos encargos
firmados en el último año. La factoría que dirige Prudencio Escamilla ha
logrado colocarse en la primera línea de combate gracias a su participación en
los nuevos programas aeronáuticos. La división militar de Airbus se hizo a
primeros de año con un sustancioso acuerdo con la norteamericana Boeing para
fabricar la protección metálica de los motores o 'fan cowl' del nuevo modelo
737-Max. Según las previsiones, el primer 737 Max se lanzará y entregará en
2014, de forma que la producción en serie de las piezas se iniciará entre 2016
y 2017. Esta carga de trabajo se la repartirán entre El Puerto y la factoría sevillana
de Tablada. El contrato asegura carga de trabajo para los próximos 20 años.
El
acondicionamiento de la planta portuense y el aumento de su plantilla para
atender la demanda que se le viene encima fueron dos de los asuntos tratados
ayer durante la visita que hizo a las instalaciones el consejero de Innovación
y Empleo, José Sánchez Maldonado, que se refirió también al segundo gran
contrato que abordará la factoría portuense. Se trata de la construcción de los
capots de la nueva variante del avión A320, conocida como A320 Neo. Esta planta
será acondicionada para desarrollar este programa aeronáutico, que incluye
piezas «más resistentes y ligeras y que serán más eficientes». Según las
previsiones, en 2019 se podría estar «en plena producción en serie de este
modelo». La compañía de bajo coste AirAsia realizó a primeros de 2013 uno de los
pedidos más importantes de este nuevo aparato. Firmó un contrato con Airbus
Military para la fabricación de 64 aviones A320 Neo y 36 de la variante A 320
Ceo.
El
titular de Economía señaló que este proyecto permitirá mantener la actividad de
la planta garantizando carga de trabajo hasta 2025 y situará a esta factoría
«entre las más avanzadas en nuevas tecnologías de fibra de carbono». Estas
expectativas supondrán el mantenimiento de los 353 empleos que tiene la planta.
Añadió que el programa redundará en la industria auxiliar de la zona con nueva
carga de trabajo, lo que implica también empleo inducido. En este sentido,
recordó que el proyecto fue respaldado la pasada semana con un incentivo de
4,84 millones de euros de la Junta de Andalucía, para una inversión total de
17,4 millones.
El
consejero insistió en que el sector aeroespacial es una actividad que el
Gobierno andaluz considera «estratégica» para Andalucía, por «su alto
componente tecnológico e innovador y porque genera riqueza y empleo de calidad y
a largo plazo». Y Cádiz, según comentó, «es un pilar fundamental de esta
industria, con un tejido empresarial formado por más de 20 empresas que suponen
el 23,5% del total de la facturación y del empleo de este sector en Andalucía».
Evolución
al alza del sector
Los
últimos datos de evolución del sector confirman que esta industria gaditana
sigue la senda de crecimiento del resto del sector, con un incremento en 2012
del 8,4% de ventas y el 4,1% del empleo en 2012. En la provincia existen 22
empresas de este sector, que facturan 436 millones.
Según
ha informado la Consejería, más de 2.650 personas trabajan actualmente en Cádiz
en alguna empresa aeronáutica, unas 1.500 personas más que hace una década, y
las ventas del sector en la provincia se han multiplicado por cuatro en los
últimos diez años, de 130 a 436 millones. En este avance, declaró Sánchez
Maldonado, «ha tenido un papel fundamental la labor de Airbus en Andalucía» y
las dos plantas situadas en la provincia gaditana -Puerto Real y El Puerto-,
que generan empleo y actividad.
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